Queridos todos.
Vengo aquí a convenceros de que la vida pasa en un suspiro, los hijos crecen tan rápido como se agotan las primeras líneas en la playa de Benidorm en agosto, y nuestra familia evoluciona mucho más deprisa de los que nuestra memoria puede almacenar, así es que sólo encuentro una solución: la fotografía. Es el método por el cual de un solo vistazo, revivimos momentos y situaciones que quedan ahí guardadas, dormidas hasta que algo las despierte.
Cada vez sois más los que dais valor a esos momentos, los que entendéis que sólo tenéis fotos cutres hechas con el móvil, y que vosotros apenas salís en las fotos con vuestros hijos porque » jo, es que no me he peinado», porque «me sale un michelín de más», «Ay, es que no me puse el tinte», «Hoy voy con el chándal» «Me salen los brazos muy gordos». ¡¡Coño ya!!
Por favor, olvida eso. Fin. Llámame.
Conciénciate de que tu familia es estupenda, tú eres estupenda/o, tu marido es genial (y viceversa), y tus hijos son estupendos, porque sois vosotros mismos y moláis. Vamos a preparar una experiencia que despierte vuestros recuerdos de este verano que va a pasar para no volver. Que va a ser único. Échate pa´lante. Si tienes una ocasión especial que fotografiar, genial, y si no, nos la inventamos, la creamos de lo cotidiano, la construimos con vuestras piezas, de lo que sois, de lo que sentís, de lo que queréis. Acuérdate por qué un día decidisteis ser una familia, sentaos juntos y charlar un rato sobre vosotros, sobre cómo empezó todo, sobre qué camino habéis decidido recorrer, y olvídate de todo eso que es absurdo, que no importa.
Nuestros hijos nos quieren como somos porque les damos amor, y luchamos por ellos. Porque les intentamos hacer la vida bonita. Por eso estamos en familia.
Comos mi Esther y su familia, que ya son «mios» porque ellos entienden perfectamente todo esto que os he explicado. Porque lo hablamos la primera vez que se pusieron en contacto conmigo y entendieron al conocerme que yo era lo que necesitaban. Y me da igual si suena muy pedante, pero es así.
¿Sientes algo cuando has leído todo este tocho?
Yo lo siento cuando veo sesiones de familia como esta. Sé que no soy la mejor eligiendo qué mostrar, pero llevan muchas fotos, y he preferido hacer una selección al azar, a lo loco:
Gracias a esta familia tan preciosa que siempre está conmigo. Me encantan. Son muy especiales, muy conscientes del paso de tiempo, de la importancia del momento, de los bonitos recuerdos, que realmente es lo único que te va a quedar. Lo material es accesorio. Lo saben, lo viven, lo sienten. Son felices con poco, con estar juntos, con pasear juntos, con vivir sencillo y bonito.
Gracias por dejarme compartir con todos estos momentos. Gracias de verdad.
A todos los demás, os estoy esperando.
Preciosas las fotos, sobre todo en la que la niña «vuela». Me encanta. Pero es lo normal en ti, hacer fotos espectaculares. Besitos
Gracias cielo!!! 😘😘😘😘
Unas fotos preciosas y cuanta verdad en tus palabras. El tiempo pasa demasiado rápido para preocuparse por pequeñeces! Un besazo
Gracias Paloma. Me encanta que lo entiendas! Un abrazo!
¡Qué belleza! La familia, los niños y tu mano de fotógrafa experta. Me ha encantado leerte.